El Presidente del Sindicato de Trabajadores Penitenciaros rompió su silencio frente a los señalamientos de un fiscal que asegura que en la cárcel “hasta duermen las visitas”.
Juan Camilo Rojas Cano es dragoneante del INPEC y Presidente del Sindicato de Trabajadores Penitenciarios. Él, con 15 años de labores ininterrumpidas en la institución, decidió hablar para defender al INPEC y el trabajo que abnegadamente realiza la guardia todos los días.
Rojas Cano rechazó los señalamientos del Fiscal de la Unidad Anticorrupción, indicando que “existen las pruebas que desvirtúan las aseveraciones del representante del ente acusador”.
El Fiscal de la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía deja mal parado al Director de la Cárcel de Neiva y a los guardias del Inpec, insinuando que allí mandan unos presos. ¿Es eso cierto?
No lo considero de esa forma. Las condiciones del establecimiento carcelario, tal y como están previstas, no permiten que nada de eso que dijo el fiscal suceda. En la actualidad, el trato para todos los internos es igual, obviamente existen algunas diferencias por razones de seguridad, pero eso no se puede catalogar como privilegio, simplemente, son condiciones diferentes que están establecidas en los manuales de funciones y que cuentan con la autorización del INPEC.
Por ejemplo, el fiscal que adelanta la investigación del llamado “escándalo de la salud”, denunció que la esposa de un detenido ingresa la penal en días que no son de visita y hasta que algunos guardias del INPEC manejan los carros de ella para entrarla a las instalaciones del penal. ¿Qué saben de esto?
Tuve conocimiento de la noticia, pero no sabemos basados en qué tipo de videos, testimonios o pruebas se atreven a dar esas informaciones que, a mi manera de ver, son malintencionadas, irresponsables y no creíbles, porque ninguno los integrantes de la guardia lo haríamos ni permitiríamos que un compañero lo hiciera. Es inaudito y no hay una sola prueba que así lo demuestre, que un guardia esté a disposición o bajo la seguridad o la conducción del vehículo de la familia de un interno, eso no existe, jamás se ha presentado un caso de esos y le aseguro que tampoco estaríamos dispuestos a permitirlo, nosotros tenemos oficios específicos que están estipulados en un manual de funciones y en eso nos basamos pues, de lo contrario, tendríamos a los entes de control encima.
¿Usted tiene conocimiento de algún tipo de investigación que adelanten los entes de control o la misma Fiscalía por estas graves acusaciones del Fiscal Anticorrupción?
No hay investigaciones ni en control interno ni en la Procuraduría sobre este tipo de denuncias, entonces, no entendemos basado en qué está circulando esta información en los medios de comunicación o basados en qué, hacen este tipo de aseveraciones que enlodan el nombre de una institución respetable como lo es el INPEC y el de los que integramos el cuerpo de guardia y custodia; todos con hojas de vida limpias, trabajadores honrados y cumplidores del deber.
Siguiendo con los señalamientos públicos que ha realizado el Fiscal. ¿Es posible que un visitante pase la noche en el centro carcelario como lo dijo el representante del ente acusador?
Eso que se quede un visitante en las instalaciones del penal es algo imposible. En la cárcel hay una hora establecida para la salida de los visitantes y unos vigilantes estrictos que están pendientes que eso se cumpla. Ninguno de nosotros, de los integrantes del cuerpo de custodia, se ha prestado para eso ni se prestará para que esto suceda, eso sería una irregularidad mayor que nos daría hasta la destitución del cargo.
¿Explíquenos cómo es el procedimiento para la visita?
Existe un sistema a nivel nacional que se llama Visitec y que opera desde la página web del INPEC. Allí, la persona se registra y luego, cada vez que pretenda visitar un interno, entra, digita el nombre del interno y se agenda. Si usted está registrado podrá acceder a un turno, pero si el interno no lo autoriza, sencillamente no puede ingresar a la cárcel.
Una vez saca el turno y si hay cupo, le es asignado. El número de visitas autorizadas por interno es de tres y el sistema no le permite inscribir ni uno más.
Llegado el día, el visitante se somete a los procedimientos de requisa estipulados por el INPEC en unos protocolos.
Posterior a esto, se pasa a otro control que es el registro de sellos, donde la persona indica a qué patio va y a qué interno visita, entonces, se le colocan los sellos en el brazo donde se le autoriza el ingreso, solo a ese patio, eso nos permite a la guardia guiar a la visita hacia su destino. Si una persona tiene el sello registrado de un patio donde no está el interno, pues sencillamente no lo puede visitar, eso está plenamente establecido.
También hacemos el registro de las pertenencias, dependiendo lo que se pueda ingresar el fin de semana, casi siempre comida, luego se pasa al control de caninos para verificar explosivos y narcóticos y, finalmente, se hace un control de entrega de ficha para verificar los documentos, como son la cédula y la foto.
¿A qué hora es el ingreso y cómo es el procedimiento de salida?
El ingreso de visita empieza desde las 8 de la mañana pero en ocasiones, por el gran número de personas, lo iniciamos a las 7:20 a.m., esto con el ánimo de colaborar.
El ingreso de la visita termina a las 11 a.m. y posteriormente, pueden salir voluntariamente desde las 2 pm en adelante. En ese momento, inician los controles al revés y a las 3 de la tarde no queda ni un solo visitante dentro de la cárcel; en ese momento, se hace el respectivo conteo de internos, se hace una verificación por parte del grupo de custodia y vigilancia, y se realiza un reporte para no tener eventualidades y novedades como que un interno se logre fugar con la visita o algo por el estilo. Como puede ver, es un protocolo complejo y estricto donde es imposible que alguien se quede.
Entonces, ¿en qué se basa el Fiscal para denunciar que existen registros que confirman que una reconocida abogada, para la fecha en avanzado estado de embarazo, pasó la noche dentro de las instalaciones de la cárcel?
Eso del reporte sí se puede dar, pero no porque la persona se haya quedado dentro del establecimiento carcelario, sino por error del sistema. Como ya le comenté, el INPEC cuenta con un sistema donde se registran personas visitantes y abogados, en esencia, todas las personas que ingresan pero, lamentablemente, este sistema no es continuo y en muchas oportunidades, casi todos los días, registra fallas, se cae y entonces no es posible registrar el mismo día las salidas, esa es la explicación, no es que se queden las visitas a pasar la noche como lo dijo el Fiscal, es que por fallas en el servicio de internet, por cortes en el fluido eléctrico, se deben hacer los registros de salida al día siguiente.
Es que el mismo sistema le dice ojo que tiene uno o varios reportes de personas que no salieron, pero eso no quiere decir que la persona realmente se haya quedado dentro del centro carcelario.
¿Son constantes este tipo de fallas en internet y el fluido eléctrico?
De hecho, cuando llueve, siempre se va la luz o falla el internet y eso sucede a menudo, es algo constante y repetitivo, pasa muy a menudo.
¿Es verdad que un detenido realizó mejoras en su lugar de reclusión y que goza de privilegios como comida especial, entre otros?
Acá existe un reglamento interno y si bien, pueden existir algunas diferencias entre internos, jamás se hace por privilegios sino por razones de seguridad. Por decir algo: acá está estipulado que ningún interno podrá tener celular, esto por obvias razones, y se cumple para todos los detenidos, no importa el delito cometido o el estrato social.
Pero sí le aclaro que está estipulado en el reglamento que los internos de algunas cárceles, como la de Neiva, debido al clima, puedan usar ventiladores y otros elementos para distracción como el televisor, pero son cosas autorizadas por el INPEC, no por la guardia y jamás se pueden denominar privilegios. Sin embargo, le cuento que en la cárcel de Neiva todo esto está prohibido por ahora debido a los problemas en el suministro de energía, pues si mantenemos muchos ventiladores encendidos, se satura el sistema y se va la luz.
Son muchos los comentarios que se escuchan en la calle sobre la impunidad en la cárcel. ¿Qué responden a eso?
Sabemos que en la calle dicen que algunos internos mandan, que tienen los súper televisores, skype, cocinero privado, que toman licor, que tienen celulares, internet y muchas otras cosas, hasta que remodelaron las celdas con baldosa fina, pero nada de eso es cierto.
¿A ustedes quién los vigila?
Todos los organismos de control nos vigilan. La Procuraduría, la Fiscalía y nuestros superiores, nuestro Comandante Operativo, el Oficial de Servicio, entonces, para cometer una irregularidad de la dimensión que están denunciando, debían ponerse de acuerdo muchos funcionarios y hasta los entes de control, algo imposible. Acá existen varios sindicatos y nosotros seríamos los primeros en denunciar eso.
¿Cuántos internos ocupan hoy el penal?
Aproximadamente 1.800 internos para una capacidad real de 932, es decir, tenemos un hacinamiento superior al ciento por ciento.
Fuente: Diario del Huila