A 95 casos aumentó el número de enfermos con paperas en la cárcel de Villavicencio, donde la Secretaría de Salud Municipal ratificó la orden de que se mantenga cerrada para evitar contagios externos, según dijo Hernán Mojica.
El cierre por la emergencia sanitaria en la cárcel ya completa dos meses y se extenderá unos 50 días más.
La cárcel esta cerrada de manera temporal y total, dijo el secretario quien advirtió que no podrán llegar más internos ni locales, ni regionales, ni nacionales, no habrá visitas de familiares a los presos, ni trasladados de reclusos de un patio a otro.
La medida ya fue comunicada a la dirección del Inpec, para proteger a los más de 1.800 presos que están en la cárcel de la capital del Meta.
Al hacinamiento en la cárcel de Villavicencio que es del 900 por ciento, se suma ahora el brote de paperas, lo que recrudece la crisis humanitaria en el centro penitenciario.
Las autoridades de salud aseguran que los recurrentes brotes de paperas, varicela y paludismo han generado serios problemas sanitarios en la cárcel.
Carlos Morales, vocero del sindicato del Inpec ratificó que la cárcel estará cerrada hasta que la Secretaría de Salud del municipio levante la alerta, y la emergencia por estas enfermedades.
El funcionario aseguró que la responsabilidad recae sobre los entes gubernamentales «pues ya es hora de que se inicie la construcción de un nuevo centro carcelario. La cárcel de Villavicencio tiene más de 40 años y no da garantías de solución para atender todo el personal interno que está a cargo de 160 funcionarios del Inpec».
Por ejemplo en uno de los patios de la cárcel de Villavicencio hay 1.330 internos, y es atendido por apenas un guardia del Inpec, los otros atienden las remisiones, las garitas y el área administrativa.
“No vamos a permitir que se sigan violando los derechos de los internos, necesitamos que el gobierno se apersone de lo que está ocurriendo”, afirmó Morales