El Juzgado Segundo Civil del Circuito de San Gil ordenó el cierre del establecimiento penitenciario de mediana seguridad de San Gil debido al hacinamiento que se presenta, ye que en 262 celdas permanecen 361 internos.
Alberto Blanco Arenas, director del establecimiento carcelario, explicó que cada celda, desde su construcción fue diseñada para alojar un solo interno.
“Son celdas muy pequeñas de 1.40 x 210 metros, donde está el espacio para el interno y para el sanitario, no caben otra colchoneta para otro interno”, indicó el funcionario.
Afirma el director que es ese centro es uno de los mejores que tiene la región, pero se presenta un hacinamiento de 38.9% lo que ha generado deterioro en la convivencia y problemas de salud.
Blanco Arenas aclaró a la comunidad y en especial a familiares de internos que esta medida de cierre es provisional en cumplimiento a lo ordenado por el juez.
“En la medida que se tenga capacidad se recibirán nuevamente internos, pero en este momento dando cumplimiento a lo ordenado, se cierra. Es una situación que se vive en muchas cárceles del país. Nosotros no contamos con sitios extras para alojar internos porque hay espacios pero son abiertos y podría presentarse fuga”, puntualizó el directivo del penal.
Obras en el penal
De otro lado, Alberto Blanco Arenas, director del establecimiento penitenciario de San Gil, informó que ya culminaron las obras que se venían ejecutando en ese lugar.
En tal sentido se logró la construcción de un muro, adecuación de una batería de baños con 12 unidades, mejoramiento del área de lavaderos, arreglo de la red eléctrica que estaba colapsada. “Quedaron pendientes unos hidrantes que por recomendación del Cuerpo de Bomberos se requieren en el penal para enfriamiento de pabellones en caso de corto y conatos de incendios”, dijo el directivo.
Fuente: Vanguardia